VIGILANT – La vuelta a la oficina: oportunidad para reinventar el Facility Management

En Vigilant analizamos de qué manera el Facility Management puede encabezar la vuelta a la oficina a través de una gestión planificada, basada en datos y apoyada en la tecnología.

Septiembre: un nuevo inicio del “curso” laboral

La vuelta a la oficina tras las vacaciones de verano supone un momento clave para evaluar, reajustar y tomar decisiones. Es como si el año volviese a empezar (o empezara de verdad) pero en el mes nueve del calendario. Un periodo que ha dejado de ser una simple transición, para pasar a ser un mes importante en el calendario de cualquier empresa para ajustar procesos, optimizar la gestión diaria y revisar cómo se aprovechan realmente los recursos.

En un entorno cada vez más flexible y tecnológico, el Facility Management debe encontrar un equilibrio entre la eficiencia de la gestión y el bienestar de las personas, garantizando que los espacios respondan a las necesidades reales de quienes los utilizan diariamente.

Gestión de espacios y personas

En Vigilant hemos visto cómo septiembre se convierte en un mes clave para que muchas organizaciones analicen hábitos de trabajo, horarios, servicios… Informaciones que permiten planificar con mayor precisión las tareas y el trabajo de cada empleado. Los sistemas de control horario y de presencia no solo ayudan a cumplir con las exigencias legales, sino que también aportan una visión clara sobre cómo se ocupan los espacios, en qué se invierte el tiempo, dónde puede haber más dificultades… en definitiva, herramientas que permiten al Facility Management anticiparse a las necesidades y mejorar la coordinación de una empresa.

La tecnología al servicio de la estrategia

El uso de tecnologías integradas en la gestión ya no es una novedad, sino una necesidad. Disponer de datos fiables en tiempo real facilita decisiones informadas, especialmente en momentos como el inicio del curso laboral. La trazabilidad, la planificación, el análisis de la presencia, las tareas realizadas… ayudan a dimensionar correctamente los recursos, pero también a mejorar la experiencia del usuario.

En Vigilant trabajamos con empresas que han transformado su día a día a partir de una gestión eficiente y teniendo en cuenta todas las variables. El reto está en incorporar tecnología y utilizarla y coordinarla en la estrategia de una empresa.

Un entorno cambiante que exige previsión

La vuelta tras las vacaciones pone a prueba la capacidad de respuesta del FM. Implica reactivar numerosos servicios, ajustar, coordinar y revisar la funcionalidad de cada espacio y el trabajo diario de los empleados, es decir, pone a prueba la capacidad de reacción y adaptación del FM.

En este sentido, una gestión planificada y basada en datos puede marcar la diferencia entre una vuelta ordenada y una improvisada, caótica. El Facility Management tiene hoy más herramientas que nunca para liderar este proceso y hacer esa vuelta a la oficina fácil, sencilla y organizada. La clave está en saber utilizar esas herramientas para una mejora continua.

El control horario como fuente de información

Más allá de su función legal, el control horario ofrece datos de gran valor para la planificación interna. En Vigilant hemos observado cómo muchas organizaciones utilizan estos sistemas no solo para registrar jornadas, sino para analizar la presencia real, identificar picos de actividad o mejorar los procesos. Integrar estos datos en la operativa del FM contribuye a una gestión más precisa, humana y eficiente del entorno de trabajo.